Un baño, independientemente de su tamaño, forma e interiorismo, debe estar bien organizado y debe tener un sistema funcional y sencillo. Las toallas suelen ocupar mucho espacio y esto a veces puede ser un inconveniente.
En cajas o bolsas.
Pero hay muchas maneras en las que puedes guardar tus toallas de baño y cada método podría ser el perfecto para tu hogar.
Guardar las toallas de baño en cajas es muy práctico. Puedes enrollarlos uno a uno y se pueden guardar en una estantería, en un estante de pared o en una caja colocada directamente en el suelo. Puede colocar manijas en la caja para que sea más fácil moverla o incluso colgarla en algún lugar para ahorrar espacio en el piso.
Toalleros.
Los toalleros son similares a los botelleros. Cada toalla se puede enrollar y almacenar en un compartimento y de esta manera puede ahorrar espacio fácilmente almacenándolas todas en un solo lugar. Además, este sistema también le permite alcanzar fácilmente una toalla limpia cuando la necesite.
Nichos de almacenamiento.
En un baño, los nichos son muy funcionales. Son espacios de almacenaje empotrados en las paredes, normalmente con varios niveles. Son maravillosos para guardar toallas, así como champús y otros artículos similares. Puede tener un nicho cerrado con una puerta de vidrio o algo menos transparente o un nicho abierto.
Exhibiciones de pared.
Dado que las toallas son imprescindibles en cualquier baño, también puede exhibirlas de una manera hermosa y agradable. Puedes optar por todo tipo de soluciones, normalmente sistemas de estanterías murales u otros diseños similares. Esta suele ser una opción más adecuada para baños amplios.
Debajo del fregadero.
El espacio debajo del fregadero suele ser un espacio muerto. Pero puedes convertirlo en un gran espacio de almacenamiento para toallas. Puede colocar algunos estantes y optar por un gabinete o un tocador. También puedes utilizar cajas, cestas u otros recipientes que puedes guardar debajo del fregadero y esconder detrás de una cortina.
Torres de toallas.
Otra opción práctica es tener un toallero de almacenaje o un sistema de baldas. Coloque las toallas una encima de la otra y guárdelas allí de forma hermosa y en un lugar fácilmente accesible. El resto de los estantes se pueden utilizar para almacenar otros artículos de baño o puedes dividir tus toallas en grupos según el color, el tamaño, etc.