Una casa orgánica rodeada de un paisaje creado artificialmente

Por lo general, son los edificios los que se diseñan en respuesta al paisaje y la topografía, y no al revés, por lo que este proyecto es tan inusual e intrigante. Es una de las pocas casas que hacen uso de lo que se conoce como arquitectura orgánica. La idea detrás de este increíble proyecto completado por el estudio Niko Architect a principios de este año fue establecer una conexión fuerte y natural entre la arquitectura y el sitio al integrar el edificio en un paisaje creado artificialmente. En otras palabras, la razón por la que estos dos elementos se complementan tan perfectamente es porque fueron diseñados de esta manera. La casa de 300 metros cuadrados se formó desde el exterior mientras se planificaba cuidadosamente el diseño y todos los detalles del diseño interior.

Ubicada en Rusia, la casa parece azular completamente los límites entre el interior y el exterior y convertirse en uno con el paisaje. Todo está equilibrado y hay una sensación de continuidad entre todos los diferentes espacios, así como entre las áreas internas y externas. En el interior, todas las zonas funcionales se combinan y forman un único gran espacio dentro del cual se pueden distinguir fácilmente diferentes secciones. Las ventanas panorámicas que se curvan y siguen la forma orgánica de la casa enmarcan hermosas vistas y aseguran una fuerte conexión visual entre el interior y el exterior.

El diseño interior es simple y artístico, con sutiles influencias japonesas y formas simbólicas en todas partes. La sala de estar tiene un área de estar hundida que crea una sensación de comodidad e intimidad sin depender de paredes divisorias o características adicionales. Muchos muebles son hermosas obras de arte y pueden servir fácilmente como decoración. Todos estos detalles abarcan el gran tema, el de la arquitectura orgánica y el diseño natural.